El PSOE sigue reajustando su maquinaria. En los cambios se mezclan las crisis (económica y de Gobierno), los movimientos internos del partido y las elecciones europeas. La crisis de Gobierno le quitó a Magdalena Álvarez un ministerio y la ha colocado tercera en las listas de las europeas. Por detrás (la sexta y no la cuarta, como se barajó) estará Carmen Romero, ex mujer de Felipe González, que vuelve a la vida política. Por delante, Ramón Jáuregui, hasta ahora segundo del PSOE en el Parlamento. En teoría se va para reforzar la candidatura, pero también hay quien ve un movimiento interno al retirar a este alabado parlamentario de Madrid. El hecho es que no acudió a su propia despedida. La carambola ha dejado a Eduardo Madina, uno de los políticos con más futuro del partido, como secretario general de los socialistas en el Parlamento. Zapatero ha hecho referencia a la juventud con la que él llegó a la secretaría general del partido para defender la decisión de aupar a este joven vasco de 32 años a un puesto de tal responsabilidad. A sus compañeros de bancada no les hacía falta justificación y lo han aclamado.
Y, entretanto, Javier Arenas, que ya no volverá a perder elecciones contra Chaves, sigue obsesionado con el ex presidente andaluz y ha dirigido hacia él sus preguntas en el Senado. Le ha dicho que “no pinta nada” en la financiación autonómica. Pronto comenzará las reuniones con los presidentes de las comunidades para debatirla. Mejor será que todos tengan una actitud un poco más receptiva porque, con o sin crisis, falta hace llegar a acuerdos.
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En tres palabras 